Por Lucas Gatica

Ya es un lugar común hoy en día que el uso de Internet y la tecnología no es dañino ni perjudicial, sino que depende del uso que le demos: cómo, cuánto, para qué las usemos. El dilema es si se constituyen en un fin o en un medio. Más allá de eso, es evidente que nuestra vida está mediada por aplicaciones, smartphones e Internet. Hay un chiste popular que reza que en la actualidad nuestro mejor amigo se llama Google.
Así, pedimos comida y pagamos los impuestos desde el celular, charlamos en videoconferencia con familiares en Australia, conocemos potenciales futuras parejas y vemos la vida de los otros en fotos y videos.
De esa manera, se puede decir que las redes sociales son espacios de relación, distintos a los espacios tradicionales. Dicho de otro modo, las redes sociales e Internet son espacios claves para las relaciones personales contemporáneas, además de ser fuentes de información, servicios y entretenimiento.
Incluso las empresas, los políticos, gobiernos y organizaciones han insertado a las redes sociales en su seno y se han adaptado a sus lógicas, colocando la atención sobre ellas. Valga como ejemplo lo relativo a la posverdad y la última elección norteamericana; el big data y el triunfo de Emmanuel Macron en Francia.

Los números en Córdoba

En primer lugar, la principal aplicación para comunicarnos es Whatsapp (78%). Es decir que 8 de cada 10 cordobeses utiliza esa aplicación en el día a día para contactarse. Asimismo, esta plataforma de mensajería instantánea ha desplazado a las llamadas o a los mensajes de texto. ¿Alguien recuerda cuándo fue la última vez que envío un sms?
En ese sentido y en cuanto al uso de aplicaciones, le siguen Facebook (69%), Youtube (54%) e Instagram (22%). Un poco más lejos aparecen Twitter (13%) y Snapchat (4%). Estas últimas tres aplicaciones tienen un sesgo más focalizado: jóvenes de clase media.
Los datos aquí presentados surgen de una de las últimas encuestas de carácter provincial realizada por la consultora Delfos en abril. El estudio se llevó a cabo en Córdoba Capital y ciudades del interior provincial, que componen muestras representativas de toda la provincia.

En esa línea y situándonos a nivel nacional, recientemente un estudio de la empresa de medición digital IMS Mobile dio a conocer algunos datos, entre ellos que los argentinos y los chilenos se encuentran en la cima de América Latina a la hora de conectarse a la web para usar redes sociales.
Así, en Argentina 85% de los usuarios de internet se abocan al uso de redes sociales, mientras que en México la cifra ronda el 79% y en Colombia llega al 78%. Estos datos aparecen a propósito del Día Mundial de Internet celebrado el 17 de mayo pasado y remarcan que el uso de la web es fundamentalmente para conectarse a las redes sociales.
Si se comparara la población de Whatsapp o Facebook, estos serían los países más poblados del mundo. A saber, un dato reciente señalaba que la red social creada por Marck Zuckerberg alcanzaba los 1.940 millones de usuarios activos.
Otros datos relacionados a esos muestran que Instagram es la red con mayor crecimiento, contando con más de 600 millones de usuarios comprendidos, en su mayoría, en personas menores de 35 años. Por su parte, Twitter sería el imaginario cuarto país más poblado del mundo con 317 millones de usuarios.
Volviendo a los datos de nuestra consultora, no se observan diferencias significativas en relación a la zona geográfica. La tendencia se repite, es decir, Whatsapp y Facebook lideran el uso de redes sociales y las diferencias encontradas entre la capital cordobesa y el interior provincial se encuadran dentro del margen de error muestral. En este caso, la mayor diferencia hallada ha sido el uso de YouTube que es utilizado con mayor frecuencia en la capital (60%) que en el interior (50%).

Lo mismo sucede en el cruce por el sexo del encuestado. No se observan diferencias notables entre hombres y mujeres en la frecuencia de utilización de estas redes sociales. Empero, vale hacer notar que son las mujeres quienes más usan Instagram (24% vs. 19%) y Facebook (72% vs. 67%).
Por otra parte en un estudio previo hemos observado un porcentaje importante de los usuarios de Facebook y Twitter utilizan esas redes sociales para informarse. En ese sentido, el 73% de los usuarios de Facebook lo usan para informarse y un 66% de los twitteros se informa en la red del pajarito (1).

El auge de Netflix, la moda de Spotify

Finalmente, el presente estudio abarcó también el nivel de uso de servicios de video y música: Netflix y Spotify. En síntesis, el 18% de los cordobeses dice utilizar Netflix y un 7% escucha música por Spotify. Si tenemos en cuenta el padrón electoral provincial estos guarismos representarían alrededor de 392 mil y 152 mil personas, respectivamente.

Se podría suponer que estas plataformas están apuntaladas por jóvenes de los centros urbanos, ya que en nuestra investigación se observa que tanto Netflix como Spotify son más usados en la capital que en el resto de la provincia (20% vs 16%, en ambos servicios). Asimismo, son las personas de la franja etaria de 18 a 29 años quienes más horas pasan en Netflix y/o Spotify.
Evidentemente Netflix ha crecido enormemente en nuestro país. Así, en el último trimestre de 2016 la plataforma de series y películas sumó más de 7 millones de nuevos suscriptores en todo el globo.
La sensación es que Netflix seguirá cosechando usuarios ya que ofrece un servicio de calidad y producciones reconocidas que sólo son posible verlas en ese espacio virtual.

Ya se ha vaticinado reiteradamente la muerte de los periódicos. Lo cierto es que los diarios en papel siguen en vigencia y adaptándose a nuevos formatos. Incluso, los discos de vinilo han reaparecido y tienen un mercado prominente.
Entonces, nos preguntamos si a partir de estas plataformas de video y música, ¿morirán la TV y los CD´s? No lo sabemos.

 

(1) Este estudio fue realizado en 2016 y es de la misma naturaleza que el presente: muestra representativa provincial de 1.800, con una confiabilidad del 95% y un error de muestreo de + – 2,3%. Asimismo, corresponde al tipo probabilístico y polietápico por conglomerados poblacionales estratificados según atributos de sexo, edad y nivel educativo.